Sobre mí
Echando la vista atrás, os puedo contar que mi relación con las artes plásticas ha estado en constante movimiento, siendo así una relación de amor-odio todo el tiempo. Cuando era más pequeña, me gustaba dibujar, e incluso llegué a ir a clases de pintura más allá de las que se podían dar en el aula escolar. No obstante, llegó un momento en el que me agobié con ellas, dejé de dibujar por lo que en aquel entonces consideraba "bien" y me salí. Desde entonces, no he vuelto a tener contacto con las artes plásticas más allá que en clases cuando correspondía por currículo a lo largo de la trayectoria estudiantil o en visitas a lugares de exposición.
Me gustaría ver las artes plásticas como un buen método para descubrirse a sí mismo, así como una manera de evasión de la realidad y de la rapidez con la que vivimos la vida. Una manera de desconectar del mundo y conectar conmigo misma.
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